¡Buenos días familias!
Hoy la profe Laura, nos trae un cuento... para que relajemos los músculos orofaciales y disfrutemos todos juntos.
EL CHICLE
Para trabajar la relajación de los músculos orofaciales, se propone la siguiente actividad a modo de juego a través de un cuento.
“El chicle” consiste en proporcionar, un chicle al niño, o imaginar que se tiene uno en la boca. El niño deberá masticarlo en función de la escucha de una la siguiente historia:
Érase una vez un niño que estaba comiendo un chicle de fresa, tenía un sabor increíble, el mejor que había probado en toda su vida.
De repente, al niño le empezó a costar masticarlo, estaba durísimo, tenía que hacer un gran esfuerzo, las masticadas eran lentas y con una gran tensión en la mandíbula…
Hasta que llegó el momento en el que el chicle volvió a ser blandito y se podía masticar con mucha facilidad.
Finalmente, el niño se relajó, cogió mucho aire e hizo una pompa enorme, la más grande nunca vista.
Hay otros cuentos que les podemos poner para ayudarles en la relajación
Cuento del gusanito.... ¿Chicos os acordáis?
¡ÁNIMO A TODOS , YA QUEDA MENOS!
No hay comentarios:
Publicar un comentario